lunes, 30 de noviembre de 2009

LAS REVOLUCIONES DE 1820, 1830 Y 1848

LAS REVOLUCIONES DE 1820

La oleada revolucionaria que se sucedió en Europa afectó fundamentalmente al área mediterránea, más concretamente a España, Nápoles y Grecia. En los dos primeros estados fracasó la implantación de sendas monarquías liberal-constitucionales debido a la intervención de los vecinos estados absolutistas.
En Grecia la revolución, que perseguía la independencia respecto al Imperio Turco, fue apoyada por Gran Bretaña, Rusia y Francia. Tras una larga guerra que duró casi una década y que concluyó en 1829, Turquía reconoció la independencia del nuevo Estado.

En América se independizaron las colonias de España y Portugal, resultando de ello el nacimiento de diversas repúblicas.

Delacroix. La matanza de Quíos

LAS REVOLUCIONES DE 1830

Delacroix. La Libertad Guiando al  Pueblo. Ver información
La Libertad guiando al pueblo
Tuvieron mayor relevancia que las de 1820.En ellas se entremezclaron reivindicaciones de carácter nacionalista (Bélgica, Polonia, Italia y Alemania) con intereses de grupos minoritarios burgueses y obreros.
El epicentro de estos movimientos, al igual que en 1789, fue Francia.

Gran parte de estas insurrecciones estuvieron auspiciadas por minorías agrupadas en asociaciones secretas, con conexiones internacionales de fuerte presencia en la oficialidad del ejército. Su objetivo era realizar una "revolución universal contra la tiranía". De entre esas asociaciones destacaron la de los masones y sus herederos más activos, los carbonarios.

LA REVOLUCIÓN EN FRANCIA.

Carlos X de Borbón (sucesor de Luis XVIII) había restablecido el absolutismo monárquico. Tras las revueltas de 1830 se vio obligado a abdicar en la figura de Luis Felipe de Orleans (1830-1848) quien instauró un régimen político liberal de signo doctrinario (moderado) con sufragio censitario.


Carlos X

Luis Felipe de Orleans. Ampliar imagen
Luis Felipe de Orleans

-BÉLGICA. Logró independizarse de los Países Bajos (Holanda) a la que había sido unida en 1815 como "Estado-Tapón". Formó un nuevo estado basado en una monarquía constitucional representada por Leopoldo I.

-ESPAÑA. Pasó de un régimen político absolutista a un régimen liberal, iniciándose un período de guerras civiles entre liberales y absolutistas (Guerras Carlistas).

-POLONIA, ALEMANIA E ITALIA.En estos países las revoluciones no tuvieron éxito, fueron aplastadas por los regímenes absolutistas de Rusia, Prusia y Austria. La mayoria de los liberales y nacionalistas polacos, italianos y alemanes hubieron de exiliarse a otros países, fundamentalmente a Gran Bretaña y Francia.

LAS REVOLUCIONES DE 1848. LA PRIMAVERA DE LOS PUEBLOS.

Imágenes de la revolución de 1848 en París. Ampliar imagen
Revolución de 1848 en París
La oleada de 1848 se inició -al igual que la de 1830- en Francia y se extendió a continuación por gran parte de Europa. Es conocida con el nombre de "primavera de los pueblos".

LAS CAUSAS DE LA REVOLUCIÓN.

  • La crisis económica desatada en Francia en 1847 como consecuencia de una serie de malas cosechas, en especial la de patatas, alimento básico para las clases populares. La crisis agraria influyó en los sectores industrial y financiero, llevando al paro a muchos obreros.
  • La negación de derechos y libertades a importantes sectores de la sociedad francesa: la monarquía de Luis Felipe de Orleans sólo satisfacía los intereses de la alta burguesía, en tanto que la pequeña burguesía como el proletariado quedaban política y económicamente desatendidos.
Hay que distinguir entre los sucesos de Francia y el resto de Europa:

-FRANCIA.

En febrero, una insurrección, protagonizada por sectores pequeño-burgueses, obreros y estudiantes forzó la abdicación de Luis Felipe y la proclamación de la IIª República bajo un régimen de acusado matiz social que implementó las siguientes medidas: sufragio universal masculino (frente al censitario), libertad de prensa, libertad de asociación y derecho al trabajo.
Tumultos en París durante la revolución de 1848. Ampliar imagen
Revolución de 1848 en París
El gobierno provisional contó por primera vez con miembros socialistas (Louis Blanc) que implantó la jornada laboral de 10 horas. Además, con el fin de mitigar el paro obrero (más de 100.000 desempleados solo en el distrito de París) fueron creados los Talleres Nacionales, impulsados desde el Estado, si bien constituyeron un fracaso y fueron clausurados tras pocos meses de funcionamiento.
En Febrero la revolución se radicalizó y la pequeña burguesía que había estado del lado de las clases obreras se alió con la alta burguesía. La lucha contra el absolutismo se transformó en una lucha interclasista entre burgueses y obreros que se saldó con una fuerte represión (más de 1.500 ejecutados).
Luis Napoleón Bonaparte (20 de abril de 1808 – 9 de enero de 1873). Presidente de la  República desde 1848 hasta 1852. Emperador de Francia desde 1852 hasta 1870. Ampliar imagen
Napoleón III
Tras la aprobación de la Constitución fue nombrado presidente de la República Luis Napoleón Bonaparte, sobrino de Napoleón, quien en 1852 se proclamó emperador con el nombre de Napoleón III, dando al traste con la mayor parte de las reivindicaciones revolucionarias e inaugurando el Segundo Imperio francés.

-EL RESTO DE EUROPA.

-EL IMPERIO AUSTRÍACO. Se produjo la caída y huida de Metternich y el emperador Fernando I hubo de aceptar la formación de una Asamblea Constituyente. Las reinvinciaciones nacionalistas se unieron a las liberales, especialmente en Hungría y Chequia, que lograron cierta autonomía dentro del Imperio.

-ALEMANIA.La revolución en Alemania también tuvo una marcado signo nacionalista. Federico Guillermo IV de Prusia hubo de aceptar una Constitución de base censitaria.
Revolución de 1848 en Berlín. Ampliar imagen
Revolución en Berlín

-ITALIA. La revuelta estuvo cargada de significado nacionalista y sirvió -pese a su fracaso- de punto de partida en el Proceso de unificación.

Palacio real de Nápoles, 11 de febrero de 1848. Ampliar imagen
Sucesos de 1848 en Nápoles
En Nápoles se implantó una monarquía constitucional que sustituyó al absolutismo; en los Estados Pontificios la sublevación hizo huir al Papa y se constituyó una república; el reino de Lombardía-Véneto se sublevó contra los austríacos y en el reino del Piamonte se creó una monarquía constitucional que se convirtió en el motor de la unidad italiana.

BALANCE DE LAS REVOLUCIONES DE 1848.

Aunque las revoluciones de 1848 fracasaron, su experiencia influyó poderosamente en las ideologías obreras del siglo XIX.

-SOCIALMENTE.

Los distintos grupos que se unieron en los inicios de la revolución se alejaron luego al defender distintos objetivos:

  • Una buena parte de la pequeña burguesía, temerosa de una revolución social, abandonó su alianza con el proletariado y se unió a la gran burguesía, aunque a lo largo del siglo XIX las diferencias entre ambas fueron bien patentes y se materializaron en las luchas políticas entre moderados y radicales.

  • El proletariado comenzó a adquirir conciencia de clase y, si bien actuó desorganizadamente, se constituyó como un movimiento autónomo desgajado de los intereses burgueses.
  • Los campesinos, una vez conseguida su liberación del régimen señorial, se condujeron de forma muy moderada y su objetivo en el futuro sería preservar las conquistas conseguidas.

-POLÍCAMENTE.

A pesar de ese aparente fracaso, los hechos acontecidos en 1848 supusieron el inicio de una progresiva democratización (sufragio universal) y la incorporación a la lucha política de la clase trabajadora.



viernes, 27 de noviembre de 2009

LA RESTAURACIÓN.

El término Restauración hace alusión al período comprendido entre la definitiva caída de Napoleón (1815) y el inicio del proceso revolucionario de 1830. Durante el mismo la monarquía francesa es restaurada en la figura de Luis XVIII de Borbón, hermano de Luis XVI y sucesor de su sobrino Luis XVII, que nunca llegó a reinar y que murió en 1795, prisionero de la revolución. En Europa esta etapa se caracterizó por el intento de recomposición del entramado del Antiguo Régimen, algo que sus partidarios no consiguieron sino de forma limitada.


CARACTERÍSTICAS DE LA RESTAURACIÓN:

-La vuelta a los principios del equilibrio europeo quebrantados por la Revolución Francesa y la política expansionista de Napoleón.

-El intento de reafirmación de los pilares del Antiguo Régimen que se asentaban en el absolutismo monárquico y la preponderancia socioeconómica de los viejos grupos privilegiados.
Las potencias más interesadas en la vuelta al pasado fueron Austria (Metternich) y Rusia (Alejandro I), que se apoyaron en otras como España y Prusia. Francia participó en menor medida en esta política. En cuanto a Gran Bretaña, no secundó las tesis absolutistas.

-La creación de un ambiente contrarrevolucionario que negaba la limitación de poder de los monarcas e impedía la libertad de reunión y de expresión, al tiempo que coaccionaba los derechos de los ciudadanos conseguidos a raíz de la Revolución.

-La identificación con una cultura romántica que sobreestimaba los modelos y valores de la Edad Media y la tradición expresados a través de un arte y una literatura que alentaba lo irracional y subjetivo frente a la lógica de la Ilustración y el enciclopedismo.

Luis XVIII de Francia (Palacio de Versalles, 17 de noviembre de 1755 - París, 16 de septiembre de 1824), representante del poder absoluto en Francia tras la caída de Napoleón
Luis XVIII de Francia


EL CONGRESO DE VIENA
El Congreso de Viena fue convocado en 1814 con el objetivo de proceder al reajuste territorial de Europa.
En él participaron las principales potencias, representadas por sus respectivos embajadores: Austria (Metternich), Gran Bretaña (Castlereagh), Rusia (Alejandro I), Prusia (Humbolt) y Francia (Talleyrand). España intervino superficialmente como potencia de segundo orden.
Sesión del Congreso de Viena. Ampliar imagen
Sesión del Congreso de Viena
Su ideario se puede resumir en los siguientes puntos:
El intento de restaurar el Antiguo Régimen, pretensión que no fue secundada por el Reino Unido.
Talleyrand
Talleyrand
La idea de legitimismo que reafirmaba el origen divino del poder de los reyes. En virtud de este principio Talleyrand logró reponer en Francia a los Borbones en la figura de Luis XVIII.
Éste sería considerado un monarca revestido de lícita autoridad frente a los que habían alcanzado el poder por el uso de la fuerza, caso de los revolucionarios franceses y Napoleón.
La solidaridad entre los estados, lo que implicaba la cooperación mutua a través de una política común capaz de neutralizar los potenciales movimientos revolucionarios.
La búsqueda de un equilibrio entre las cinco grandes potencias.

Se configuró un nuevo mapa de Europa

En la reordenación de las fronteras, que habían sido alteradas por las conquistas napoleónicas, no se tuvieron en cuenta las aspiraciones nacionalistas, tampoco los derechos de algunos príncipes que habían sido despojados de sus tronos por los franceses en años precedentes.

LA SANTA ALIANZA

Fieles al principio de solidaridad entre reyes, los monarcas ruso (ortodoxo), austríaco (católico) y prusiano (protestante), que se consideraban a sí mismos reyes por la "Gracia de Dios", firmaron el Pacto de la Santa Alianza. Se trataba de un documento que, invocando los principios del cristianismo, pretendía sustentar las relaciones internacionales mediante una serie de máximas religiosas como la "eterna religión de Dios salvador". Inglaterra no suscribió dicho texto, pero promovió una "Cuádrupe Alianza" que se fundamentó en los siguientes extremos:
  • El compromiso de mantener estatus territorial vigente.
  • Extremar la vigilancia para detectar y sofocar las iniciativas revolucionarias liberales.
  • Celebrar periódicamente congresos o reuniones con el fin de actualizar las pautas a seguir.
  • Crear una fuerza armada lista para intervenir en caso de necesidad.
La Cuádruple se transformó en Quinta Alianza
en 1818. Ésta incorp
oró a Francia como nuevo integrante e intervino en Nápoles y España (1823) con el objetivo de sofocar las experiencias liberales que estaban teniendo lugar en dichos países. Los aliados proyectaron incluso intervenir en América con el objetivo de restablecer la autoridad del rey de España en los nuevos estados independizados recientemente de ésta, pero se encontraron con la frontal oposición de los Estados Unidos de América cuyo presidente Monroe, en 1823, proclamando la política de "América para los americanos", dejó bien explícito su rechazo a cualquier tipo de intervención europea en el continente.
Klemens Wenzel Lothar von Metternich (Coblenza, 15 de mayo de 1773 - Viena, 11 de junio de 1859), principal impulsor de la política de la Restauración
Metternich, canciller de Austria




viernes, 20 de noviembre de 2009

NAPOLEÓN Y LA NUEVA EUROPA

El gobierno de Napoleón (1799-1815) encarnó la consolidación del nuevo estado francés heredero de la Revolución. Se asentó sobre un régimen personalista y autoritario que sin embargo difundiría los ideales revolucionarios mediante la ocupación de numerosos estados de Europa.

La labor de Napoleón se proyectó en los siguientes planos:

EN EL PLANO INTERNO:

Para Francia el período napoleónico supuso la consolidación definitiva de la obra de la Revolución desde sus presupuestos más moderados

A nivel político-jurídico

Napoleón durante el Directorio. 1797. Ampliar imagen
Napoleón. 1797
Napoleón afianzó las principales conquistas revolucionarias aunque eliminando sus aspectos más radicales y tendiendo a una cada vez mayor concentración de poder en su persona. Los pasos que siguió fueron: el Consulado (1799-1802), el Consulado Vitalicio (1802-1804) y, finalmente, el Imperio (1804-1815). Se apoyó para ello en la alta burguesía y el ejército.
Sus realizaciones más notables se concretaron en la creación de una administración local de estructura centralizada, la organización judicial (los jueces fueron convertidos en funcionarios) y la reestructuración del aparato burocrático.

Coronación de Napoleón. Pintura de David. Ampliar imagen
Coronación de Napoleón

El resultado de esta política se materializó en su Código Civil (1804) que garantizaba la libertad individual, la igualdad ante la ley, la propiedad privada y la libertad económica.

A nivel social

La alta burguesía junto a sectores de la nobleza exiliada repatriada se convirtió en la clase dirigente de Francia en tanto que el campesinado conservó las ventajas alcanzadas tras las reformas de la Revolución.

A nivel ideológico

Hay que tener en cuenta dos aspectos contrapuestos:


Napoleón, 1812
Por un lado, Napoleón mantuvo muchos de los principios de la Revolución: liberalismo, soberanía nacional garantizada por sufragio universal, separación de poderes, subordinación del clero al Estado, fomento de la educación, etc.
Pero por otro, desvirtuó el sufragio universal, entorpeció la acción del cuerpo legislativo, la educación fue utilizada como un medio de control moral y político, los tribunales sufrieron una depuración (imposición de magistrados afectos al régimen), la libertad de prensa y de palabra se recortaron y la etiqueta cortesana al estilo de las monarquías absolutas fue recuperada. Finalmente, en materia religiosa Napoleón restableció las relaciones con el Vaticano (Concordato de 1801) y todos los obispos juramentados afectos a la Revolución fueron destituidos.

EN EL PLANO INTERNACIONAL :
Napoleón persiguió la idea de una Europa unida bajo un mismo orden, caracterizado por la abolición de la sociedad estamental. Para poner en práctica dicho proyecto se embarcó en una política imperialista que liquidó bruscamente los reductos del Antiguo Régimen.

La política imperialista

Para ejecutarla se valió de un moderno ejército que utilizando tácticas revolucionarias venció a cuantas coaliciones se le enfrentaron, esencialmente las integradas por Austria, Rusia y Prusia bajo la dirección de Inglaterra.

El resultado fue la formación de un extenso imperio bajo el liderazgo de Francia, organizado y regido personalmente, a través de familiares o militares de confianza, con la colaboración de las clases ilustradas de los países conquistados, en los que se promulgaron constituciones y códigos similares al francés.




1) Francia antes de la Revolución; 2) Conquistas durante la Convención; 3) Anexiones de la época de Napoleón; 4) Límites del Imperio; 5) Reinos y países vasallos de Francia; 6) Estados amigos u ocupados; 7) Estados aliados.
Austerlitz. Conmemoración
La formación de ese imperio fue posible gracias a una serie de ininterrumpidas victorias militares frente a rusos, austríacos y prusianos (Ulm, Austerlitz, Jena, etc). Sin embargo, fracasó en el intento de bloquear a Inglaterra por mar.

Las dificultades que encontró en España (Guerra de la Independencia), el fracaso de la campaña de Rusia y la enérgica acción de Inglaterra (derrota franco-española de Trafalgar, 1805) hicieron fracasar sus pretensiones imperiales. Tras ser vencido Leipzig (1813) fue desterrado a la isla de Elba (1814).

Goya. Los fusilamientos del 3 de Mayo. Representa la represión de las tropas francesas sobre los sublevados de Madrid. Ampliar imagen
Guerra de la Independencia

La campaña de Rusia supuso un duro descalabro para las tropas de Napoleón que fueron sorprendidas por el duro invierno. Las pérdidas de su ejército fueron enormes. Ampliar imagen
Campaña de Rusia

La caída de Napoleón

Supuso la restauración de los Borbones en Francia en la persona de Luis XVIII, interrumpida por el corto regreso del emperador al poder (Imperio de los Cien Días). Tras ser derrotado en Waterloo (1815), fue desterrado a la isla de Santa Elena (en el Atlántico) donde murió en 1821.

Arthur Wellesley, primer duque de Wellington (1769-1852), vencedor de Napoleón en Waterloo. Ampliar imagen
Wellington
Napoleón en Waterloo. Ampliar imagen
Napoleón en Waterloo

LOS LOGROS DE NAPOLEÓN:

Se materializó en varios campos:

En el campo político-social y militar

Supuso la extensión de las formas revolucionarias, del liberalismo (Código de 1804) y la quiebra definitiva de las estructuras feudales. Esa labor se concretó en:

  • El nacimiento de una serie de constituciones de signo liberal moderado (Ej. el Estatuto de Bayona de España, 1808).
  • El ascenso de la burguesía como nueva clase dominante frente a la nobleza y el clero.
  • La puesta en práctica del Derecho moderno.
  • La innovación de los ejércitos y las tácticas militares.

Representación de la batalla de Borodino, en la que Napoleón venció a los rusos. 1812
Batalla de Borodino

En el campo económico

Consolidó las reformas agrarias llevadas a cabo durante la Revolución y propició la formación de un campesinado de clase media que transmitió a Francia estabilidad política. Aunque una significativa parte de las tierras expropiadas a la nobleza durante la revolución fueron devueltas a sus antiguos dueños, la operación se materializó bajo las formas jurídicas y de explotación capitalistas. Además se sentaron las bases para que Francia iniciara su industrialización.

En el aspecto ideológico

El imperialismo napoleónico fomentó los nacionalismos, tanto el francés como el de los estados que fueron ocupados por sus ejércitos. También aseguró las bases de la enseñanza láica plasmada en la reforma de la Enseñanza Secudaria (Bachillerato) que gozaría de gran prestigio internacional y subsiste aún en nuestros días.
Caricatura denunciando la labor de Napoleón. Ampliar imagen
Caricatura sobre la obra de Napoleón
Este legado perduró a pesar de los intentos de involucionismo promovidos por los sectores más reaccionarios a raíz del Congreso de Viena y materializados en la acción de la Restauración.

EL IMPERIO DE LOS CIEN DÍAS.

En 1814 las tropas coaligadas entraron en París y Napoleón se vio obligado a abdicar y exiliarse. Se le concedió el gobierno de la isla de Elba (situada en el mar Tirreno, muy cerca de Italia) y se le permitió conservar el título de Emperador.

Luis XVIII. Ampliar imagen
Luis XVIII
En Francia fue restaurada la monarquía en la persona de Luis XVIII (hermano del guillotinado Luis XVI). Sin embargo, meses más tarde (febrero de 1815) Napoleón abandonó la isla, se trasladó a París y tomó de nuevo el mando de Francia. Luis XVIII huyó a Bélgica y el Imperio fue reanudado.
Transcurridos poco más de tres meses (“Imperio de los cien días”), el emperador fue derrotado en Waterloo por una coalición (la séptima) de potencias integrada por Reino Unido, Austria, Prusia y Rusia.
El duque de Wellington, vencedor de Napoleón en Waterloo. 1815. Ampliar imagen
Wellington, vencedor en Waterloo

La derrota de Waterloo supuso el fin del imperio napoleónico y concluyó con su destierro a la remota isla atlántica de Santa Elena, donde permaneció bajo custodia hasta su muerte en 1821.

Por segunda vez regresaba Luis XVIII y en Francia era reinstaurada la monarquía.

"A pesar de todas las difamaciones, no tengo ningún miedo respecto a mi fama. He librado cincuenta batallas campales, la mayoría de las cuales he ganado. He estructurado y llevado a cabo un código de leyes que llevará mi nombre a la más lejana posteridad. Me levanté a mí mismo de la nada hasta ser el monarca más poderoso del mundo. Europa estuvo a mis pies. Siempre he sido de la opinión de que la soberanía reside en el pueblo. De hecho, el gobierno imperial fue una especie de república. Habiéndome llamado la nación a dirigirla, mi máxima fue: la profesión está abierta a los inteligentes, sin distinción de nacimiento o fortuna, y es por este sistema igualitario por el que la oligarquía me odia tanto."

Napoleón Bonaparte. Santa Elena, 3 de marzo de 1817.

viernes, 13 de noviembre de 2009

LOS CLUBS POLÍTICOS EN LA REVOLUCIÓN FRANCESA

Girondinos, cordeleros, jacobinos y montañeses

EL PAÍS / Madrid / Cultura / 23-04-2005
Con la Revolución Francesa nace la terminología "derechas" e "izquierdas", por el lugar que los diputados de las diversas tendencias ocupaban en la Asamblea Constituyente respecto a la presidencia.

La revolución de 1789 fue pródiga en corrientes políticas. Comenzando por la extrema derecha, estaban los emigrados, nobles intransigentes que huyeron al extranjero y trataron de restaurar la monarquía absoluta. Peones de la contrarrevolución fueron los chuanes, campesinos de la Vendée, que apoyaban la monarquía. En la derecha moderada se encontraban los fuldenses, partidarios de la monarquía constitucional, opuestos al antiguo régimen y a la democracia. Su nombre procedía de un antiguo convento de los feuillants en el que se reunían. Pronto desaparecieron de la escena política. En la izquierda moderada se encontraban los girondinos, originarios de la zona de Burdeos, y que representaban a la pequeña burguesía ilustrada. Ocuparon el poder tras la caída de Luis XIV, pero en un choque decisivo con los jacobinos fueron físicamente aniquilados en la guillotina. A los jacobinos se les llamaba así porque se reunían en un convento dominico (jacobins). A partir de 1792 pasaron a ser los montañeses porque se sentaban en la parte más alta de la cámara y componían la izquierda de la Asamblea (Robespierre, Marat, Danton, Desmoulins). Más a la izquierda estaban los cordeleros (tenían la sede en un convento de franciscanos) y en la extrema izquierda estaban los enragés (rabiosos).

EL CLUB DE LOS FEUILLANTS( LOS FULDENSES ).

El Club des Feuillants es el nombre con que se conoce familiarmente en francés a los Amigos de la Constitución, un grupo político, de tendencia monárquica constitucional opuesto al derrocamiento del rey Luis XVI, tras la Fuga de Varennes el 22 de junio de 1791.

EL club nace el 16 de julio de 1791, con la publicación de un manifiesto, originada en una escisión de la parte moderada del club de los Jacobinos y del club de 1789. Este club, cuyo acceso estaba reservada a los "ciudadanos activos", es decir a cualquier contribuyente que pagara impuestos directos, se fundó originalmente para contrarrestar la progresiva influencia de los Jacobinos radicales. Sus primeras sesiones se desarrollaron en el Palais-Royal, y luego en el antiguo convento de los Monjes Bernardos (feuillants), lo que originó su nombre.

De número variable entre 160 y 264, sus miembros agrupaban a los moderados, favorables a una monarquía constitucional y a la Constitución de 1791. Los Feuillants estaban dirigidoss por Barnave. Entre ellos estaban Bailly, Duport, La Fayette, Lameth, Sieyès, Ramond de Carbonnières.

Su influencia desapareció con la Asamblea Legislativa el 21 de septiembre de 1792. En marzo de ese mismo año los Girondinos excluyeron a los ministros feuillants como represalia por su oposición a la guerra con Austria. Tras la caída de la monarquía el 10 de agosto, son acusados por sus adversarios de realistas y traidores. Se crea una lista con 841 miembros que son arrestados y juzgados por traición. El 29 de noviembre de 1793, su jefe Barnave sube al cadalso.

Como sus adversarios le habían colocado la etiqueta de "club monárquico" a los Feuillants, este nombre sobrevivió varios meses como insulto sinónimo de moderado, realista y aristócrata.

LOS GIRONDINOS

Girondino, nombre dado a un grupo político moderado y federalista de la Asamblea Nacional y de la Convención Nacional que estaba compuesto por varios diputados procedentes de Gironda. Pertenecían, en su mayoría, a la burguesía provincial de los grandes puertos costeros. Su violento enfrentamiento con el grupo de los montañeses dominó los primeros meses de la Convención Nacional.


El grupo contaba con 175 diputados de los 749 que componían la Asamblea de la Convención y gobernaron durante los años 1792 y 1793. En su mayoría eran miembros intelectuales de la rica burguesía del mundo de los negocios.

Conocidos, en esa época, como los Brissotins o Rolandistes, el nombre de Girondino se popularizó a principios del siglo XIX, sobre todo a partir de la obra de Lamartine Histoire des Girondins (Historia de los Girondinos). Sus miembros, en su mayor parte adscritos al Club de los Jacobinos estaban considerados, por los diputados de París, dirigidos por Robespierre, como los más radicales de la asamblea.

Acusados por los jacobinos de conspirar contra la unidad de la República, sus dirigentes fueron guillotinados por orden de Robespierre (1793).

En la Convención Nacional, los girondinos, en su mayoría diputados provinciales, fueron instalados a la derecha, y la Montaña, compuesta por veinticuatro diputados de París y otros, fue instalada a la izquierda. Los girondinos dominaban la Asamblea e, inmediatamente, empezaron a atacar a la Comuna de París y a los montañeses (más conocidos también como jacobinos) a los que consideraban responsables de las Masacres de septiembre. Marat fue el primer implicado.

Aunque fueron acusados de federalistas, los girondinos, se aprovecharon de la favorable evolución de la situación militar (victoria de Jemappes, 6 de noviembre de 1792) para relanzar la Convención girondina. Sin embargo, durante el proceso de Luis XVI, los girondinos, que se oponían a su condena, fueron considerados poco republicanos. La situación militar sufrió un cambio (derrota de Neerwinden, 18 de marzo de 1793), traición de uno de ellos Dumouriez (5 de abril de 1793) y su oposición contra la institución de un Tribunal revolucionario, les comprometió definitivamente.

Los girondinos fueron los primeros en decretar el arresto de Marat por la Convención Nacional (13 de abril de 1793) ; pero Marat fue absuelto por el Tribunal Criminal Extraordinario y recuperó, triunfante, la Asamblea (24 de abril de 1793). Después, a fin de debatir sobre las exacciones de la Comuna de París y de velar por la seguridad de la Comuna de París nombraron una comisión, Comisión de los Doce (Commission des Douze o Comité de Salvación Pública) a la que se le otorgó poderes para los arrestos. Hébert, sustituto de la Comuna de París fue arrestado. La Comisión de los Doce quedó establecida. Los montañeros consiguieron la aceptación del pueblo de París.

LOS JACOBINOS

Término procedente de “Jacobin”, es decir, del latín “Iacobus” (Santiago), en alusión a un convento de París donde celebraron durante algún tiempo sus reuniones los integrantes del grupo de revolucionarios al que le fue aplicado el vocablo.

Los jacobinos constituían el ala radical de la revolución, en oposición a los más moderados girondinos. Por el lugar que ocuparon en la Asamblea Nacional (el más alto de la tribuna izquierda) también se les designó con el apelativo de “montañeses”.

Desplazaron a los girondinos del poder en junio de 1793 y en gran medida fueron los responsables de la ejecución del rey Luis XVI. En julio de 1794 (Thermidor o "cálido") un golpe de estado protagonizado por los sectores más moderados (la "Llanura") de la revolución acabó con el gobierno jacobino, poniendo fin a la etapa denominada “Régimen de Terror”, en alusión al gran número de ejecuciones llevadas a cabo bajo el liderazgo de los más exaltados (Robespierre).

Destacados jacobinos fueron Robespierre y Saint-Just.

En la actualidad el término jacobino se aplica a quien es partidario de medidas revolucionarias o al izquierdista radical. También se aplica con carácter peyorativo como sinónimo de exaltado, violento o sanguinario.

LOS CORDELIERS( CORDELEROS).

El Club de los Cordeliers o Sociedad de los derechos del hombre y del ciudadano es una sociedad política creada en París en abril de 1790 que se estableció en la antigua capilla del Convento de los Cordeliers (hoy museo Dupuytren).

La creación del club tiene por objeto vigilar la asamblea y ser el espíritu crítico de la misma. Asimismo se propone ayudar a los indigentes, lo que no hacen los jacobinos, la entrada es libre. Se entra en el club sin pagar ninguna cuota, una bandera extendida en la puerta sirve para recoger los donativos que se quieran hacer.

Más radical que el club de los Jacobinos, sus miembros toman parte activa en los movimientos revolucionarios que se sucedieron en la Asamblea Constituyente, la Asamblea legislativa y la Convención nacional. Es el que organiza, asimismo, la manifestación del Campo de Marte, el 17 de julio de 1791; rechaza la Constitución de 1791 y pide la inhabilitación del rey y su arresto tras la huida del mismo a Varennes. El 10 de agosto de 1792 apoya la petición del derrocamiento del trono de Francia; y el 22 de mayo de 1793 fomenta una insurrección pidiendo la desaparición de los girondinos de la Convención Nacional.

Tras la caída de los girondinos, el club se divide en Indulgentes (los Dantonistas) y Enragés (los Hébertistes), autores de la ley de sospechosos y partidarios de una dictadura de la Comuna. Tanto el uno, como el otro, fueron guillotinados el 24 de marzo y 5 de abril de 1794; Marat fue asesinado por Charlotte Corday el 13 de julio de 1793.

El Club de los Cordeliers vencido por el Club de los Jacobinos y dependiente del mismo, subsistió más tiempo que éste último, desapareció en abril de 1795.


Os dejo una presentación de powerpoint que resume muy bien todo el tema de la Revolución Francesa: