martes, 16 de marzo de 2021

La Segunda República: una experiencia frustrada.

 

  Comenzamos el tema de la II República explicando su origen y proclamación. Hay que destacar que lII república "adviene", es decir, llega por decaimiento de la monarquía, casi podríamos decir que aparece y ocupa el vacío de poder que deja Alfonso XIII que se ve obligado por las circunstancias a suspender "temporalmente" sus prerrogativas regias y marchar del país al haber "perdido el amor" de su pueblo. Lo que sucede entre el 12 y el 14 de abril no puede ser más que calificado como una auténtica revolución (el poder lo tomó un autodenominado "Comité Revolucionario"),un cambio radical en la historia de España que, para asombro del mundo, se hizo sin que apareciera violencia alguna en esas jornadas históricas, una violencia que, no obstante, estará latente durante todo el período republicano. 


FASES DE LA II REPÚBLICA
  
EL GOBIERNO PROVISIONAL

   Después de la renuncia del último gobierno de la monarquía presidido por el Almirante Juan Bautista Aznar  el Comité Revolucionario, que se encamina hacia la Puerta del Sol, accede al edificio de la Casa de Correos, abriéndose paso ante las fuerzas de seguridad allí presentes con un sencillo pero contundente mensaje de Miguel Maura:

         "Señores, paso al Gobierno de la República"



TEXTO Nº 1: DECRETO. ESTATUTO JURÍDICO DE LA REPÚBLICA.
 
   "El Gobierno provisional de la República ha tomado el poder, sin tramitación y sin resistencia ni oposición protocolaria alguna; es el  pueblo quien le ha elevado a la posición en que se halla y es él quien en toda España rinde acatamiento e inviste de autoridad.  En su virtud, el presidente del Gobierno provisional de la República asume desde este momento la Jefatura del Estado, con el asentimiento expreso de que las fuerzas políticas triunfantes y de la voluntad popular, conocedora, antes de emitir su voto en las urnas, de la composición del Gobierno provisional. Interpretando el deseo inequívoco de la Nación, el  Comité de las fuerzas políticas coaligadas para la instalación del nuevo régimen designa a Don Niceto Alcalá-Zamora y Torres para el cargo de Presidente del Gobierno provisional de la República".

   Este decreto será publicado en el boletín oficial, la  Gaceta de Madrid ,el día 15 de Abril. Asimismo se elabora un Estatuto Jurídico del Gobierno Provisional, que regulará el período de transición hasta la aprobación de la nueva Constitución. Se nombran también a los ministros, incluso aquellos que no se encontraban aún en España por diversas circunstancias políticas.  



 El gobierno provisional comenzó con las reformas demandadas por parte de la sociedad a través de decretos ministeriales y, siguiendo los acuerdos del Pacto de San Sebastián, convocó elecciones a Cortes Constituyentes para el 28 de junio de 1931. Para ello modificó por decreto la Ley Electoral de la Restauración acabando con el caciquismo y permitiendo a la mujer ser nombrada "diputado" aunque todavía no obtuvo el derecho de voto. 

 También trató de garantizar el orden público y procurar la sustitución pacífica de las autoridades (en el ministerio de gobernación, el edificio de la Puerta del Sol, Miguel Maura llamó a todos los gobernadores civiles por teléfono, destituyéndolos uno a uno y nombrando a nuevos fieles a la república). Siguieron en sus cargos el Director General de la Guardia Civil, José Sanjurjo (que se había puesto a las órdenes del gobierno legítimo de la república) y el Jefe del Estado Mayor Central, General Manuel Goded.


La república española, con su simbología (bandera tricolor, escudo histórico con corona mural, himno de Riego) y su nueva Constitución de 1931, la primera verdaderamente democrática de nuestra historia, supondría el último intento de solucionar los problemas del país antes de la Guerra Civil. Fue un período frenético en el que, en tan solo dos años (el primer bienio) bajo la dirección política de Manuel Azaña como Presidente del gobierno, se pusieron en marcha todas las reformas que el país venía necesitando desde hacía décadas, recogiendo también parte de ese espíritu de regeneración de Joaquín Costa. Desgraciadamente las fuerzas monárquicas y ultraconservadoras, la iglesia y los terratenientes se opondrán a ella desde el principio. Pero también se mostrarán adversos a ella, con frecuentes insurrecciones, los grupos anarcosindicalistas que la veían como un impedimento para la destrucción del estado burgués y la revolución proletaria.

Para finalizar os dejo la presentación en powerpoint del contenido del tema: