martes, 22 de marzo de 2011

LA PROCLAMACIÓN DE LA SEGUNDA REPÚBLICA

  
      El 14 de Abril de 1931 era proclamada la Segunda República Española. Se iniciaba así un periodo que pretendía solucionar los graves problemas del país y que no habían sido resueltos por la monarquía de Alfonso XIII: cuestión agraria, cuestión educativa, cuestión religiosa, cuestión territorial. Una serie de asuntos pendientes que derivan de la grave crisis del 98 y que estuvo espoleado por el "Regeneracionismo", movimiento de revisión de los males de la patria por parte de intelectuales y políticos de la época. 
    Por tanto, debemos estudiar la Segunda República como un último intento de arreglar las cuestiones pendientes de solución. Este intento fracasará claramente y llevará al país a la fraticida Guerra Civil. Más adelante veremos las causas que llevan a la Guerra. En principio cabe decir que los diferentes grupos sociales y políticos que actuaron durante la república no lograron poner en pie un régimen de concordia y entendimiento y, por lo tanto, no fue posible el asentamiento de un régimen político democrático.



        Las elecciones municipales del 12 de abril de 1931 dieron el triunfo a los candidatos republicanos y socialistas en casi todas las grandes ciudades. El 14 de abril de 1931 se proclamó la II República en medio de manifestaciones de alegría popular. Alfonso XIII y su familia abandonaron el país. Se hizo cargo del poder un Gobierno provisional, presidido por Niceto Alcalá Zamora.

      El Gobierno provisional estuvo integrado por todos los partidos republicanos y los socialistas que participaron en el Pacto de San Sebastián ( 1930).Tomó medidas que anticiparon su carácter profundamente reformador. Pero su prioridad fue la convocatoria de elecciones a Cortes Constituyentes, para aprobar una nueva Constitución.

Aquí tenemos el Himno de Riego ( himno oficial de la Segunda República), con su letra.
Serenos y alegres
valientes y osados
cantemos soldados
el himno a la lid.
De nuestros acentos
el orbe se admire
y en nosotros mire
los hijos del Cid.

Soldados la patria
nos llama a la lid,
juremos por ella
vencer o morir.

El mundo vio nunca
más noble osadia,
ni vió nunca un día
más grande el valor,
que aquel que, inflamados,
nos vimos del fuego
excitar a Riego
de Patria el amor.

Soldados la patria
nos llama a la lid,
juremos por ella
vencer o morir.

La trompa guerrera
sus ecos da al viento,
horror al sediento,
ya ruge el cañon
a Marte, sañudo,
la audacia provoca
y el ingenio invoca
de nuestra nación.

Soldados la patria
nos llama a la lid,
juremos por ella
vencer o morir.




3 comentarios:

Cayetano dijo...

Una gran oportunidad perdida. La República nacía en una época de depresión económica, con graves problemas que se arrastraban desde hacía mucho tiempo. Y luego estaban los extremismos, las prisas, los enfrentamientos... Creo que el desenlace fue inevitable. Después retrocedimos en derechos, libertades, educación y cultura.
Un saludo.

Luis Pueyo dijo...

Por supuesto, que duda cabe que la Segunda República supuso una oportunidad magnífica. Y también está claro que los extremismos ( de derechas y de izquierdas) la derribaron. No vamos a recordar ahora el golpe de Sanjurjo, Casas viejas, la revolución de Asturias, el Estat Català,ect. Por desgracia muchos de los proyectos quedaron pendientes. Y por desgracia se vió envuelta en una etapa poco propicia para la democracia. La consecuencia de este régimen fallido fue la inevitable guerra civil. Una tragedia colectiva de la que debemos aprender y enseñar a nuestros alumnos para no volver a repetir los errores de ambos bandos.

Luis Pueyo dijo...

Por supuesto, que duda cabe que la Segunda República supuso una oportunidad magnífica. Y también está claro que los extremismos ( de derechas y de izquierdas) la derribaron. No vamos a recordar ahora el golpe de Sanjurjo, Casas viejas, la revolución de Asturias, el Estat Català,ect. Por desgracia muchos de los proyectos quedaron pendientes y eran dignos de admiración: Estado Integral con autonomía para las regiones,ect. Y por desgracia se vió envuelta en una etapa poco propicia para la democracia. La consecuencia de este régimen fallido fue la inevitable guerra civil. Una tragedia colectiva de la que debemos aprender y enseñar a nuestros alumnos para no volver a repetir los errores de ambos bandos.