martes, 9 de abril de 2013

La Segunda Guerra Mundial

La Segunda Guerra Mundial. Análisis de imágenes sobre el tema.

Una imagen de Hitler de joven cuando se alistó como combatiente en la I GUERRA MUNDIAL


Cartel de las S.A. Organización paramilitar nazi ( Camisas Pardas)

Propaganda del Partido Nacional Socialista de Alemania


Expansión territorial de Alemania antes de la Segunda Guerra Mundial ( Lebensraun)


Hitler con Göering

Noticia del diario PRAVDA sobre el bombardeo de HIROSHIMA





4 comentarios:

Arantxa dijo...

Creo que existen otras manifestaciones artísticas mucho más explícitas en cuanto al belicismo en el arte de este periodo, que hubieran supuesto un hilo conductor más claro respecto al tema que estáis tratando. Pero se agradecen unas "pinceladas" de expresión entre tanta crudeza realista.

Luis Pueyo dijo...

es cierto, voy a buscar alguna ficha más acorde con la II G. Mundial. Un saludo.

Luis Pueyo dijo...

Por cierto: me podrías orientar un poco en este sentido. Alguna idea de obras o autores más acordes. Digamos que Münch si es digno de figurar aquí, Picasso no, es cierto. ¿Qué autores y/u obras introducirías?

Arantxa dijo...

Quizá la palabra "explícitas" no sea la adecuada. Realmente durante la IIGM y la posguerra, la aniquilación del espíritu conduce a la quiebra traumática de la creatividad, la conciencia y la inspiración europeas. Los grandes vencedores americanos y los nuevos refugiados se encargan ahora de enarbolar el "legítimo" centro artístico mundial en Nueva York relegando las tendencias parisinas de principios de siglo.
La obra pictórica bélica de los 40 y 50, como tal, no mantiene una relevancia artística, más bien representa una vanguardia desangelada, en la que EEUU sigue sin comprometerse ideológicamente con su expresionismo abstracto, en pro de la libertad individual y de mercado que personifica.
Algunos nombres: Gorky, Gottlieb, Kooning, Kline y, sobre todo, Pollock. Por cierto, Picasso no encaja del todo mal. Su reflexión acerca de la barbarie es atemporal y su descomposición figurativa abre numerosas vías de escape a la reinterpretación del arte de este periodo.